A finales de 2013, Juan Carlos Novoa Buendía en condición de procurador delegado presentó el fallo preliminar mediante el cual se destituyó por 15 años al entonces alcalde de Bogotá, Gustavo Petro Urrego.
Su jefe, el otrora procurador general Alejandro Ordóñez, lo avaló al considerar que Petro incurrió en tres faltas disciplinarias gravísimas derivadas del proceso contractual mediante el cual retornó al Distrito la prestación del servicio de aseo en Bogotá que estaba en manos de operadores privados.
No obstante, Petro volvió al poder en Bogotá el 23 de abril de 2014 por decisión del Tribunal Superior de Bogotá que acogió, entre otros argumentos, las medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que protegió los derechos políticos del mandatario.
Pero, 11 años después, el martes de la semana pasada, el exprocurador Novoa se reunió en las oficinas alternas del nuevo procurador Gregorio Eljach.
Novoa, no solo fue el consentido de Ordóñez, sino es asiduo contratista del Estado, en los últimos años en condición de persona natural ha celebrado 31 contratos por $2.895 millones con diferentes entidades del Estado.
También a través de su firma Novoa Buendía SAS, ha firmado otros 26 contratos estatales en cuantía total de $3.564 millones. Una firma constituida el 7 de marzo de 2019.
Paradójicamente, fue el presidente Gustavo Petro quien ternó como su candidato a procurador general a Gregorio Eljach, quien pocos días después, el pasado 2 de octubre fue elegido con 95 votos de 102 posibles, por el Senado de la República, ganando ampliamente la elección al exministro Luis Felipe Henao y al excongresista Germán Varon Cotrino.
Reunión discreta
Era el martes posterior al puente festivo del 11 de noviembre. La agenda del procurador electo, como sucede por estos días, está full, indicó una fuente cercana a Eljach, a la Agencia de Periodismo Investigativo, API.
Actualmente, Gregorio Eljach, tras renunciar al cargo de secretario general del Senado, se tomó unos días de descanso y recientemente retomó sus actividades de empalme en el Ministerio Público con el equipo de Margarita Cabello.
Para ello está despachando en dos oficinas que adaptó en Residencias Tequendama, ubicadas en el centro internacional de Bogotá.
En una atiende especialmente a congresistas. Allí se encarga del proceso de selección de lo que será su nuevo equipo de trabajo. En la otra oficina se dedica a asuntos más personales y allí recibe a sus amigos de confianza.
Está conformando una especie de cónclave de cerca de doce personas, quienes lo están apoyando en la parte política, jurídica y técnica en lo que tiene que ver con la entidad en cuanto a sus labores y la organización que deja la saliente Cabello.
Justamente, uno de los cercanos al procurador Eljach, vio con sorpresa como Novoa ingresó a las oficinas en las que despacha por ahora el electo funcionario.
Con otra particularidad, iba acompañado de Saúl Cruz Bonilla, hombre de confianza de Eljach, como quiera que ha sido su segundo en la secretaria general del Senado de la República en donde se desempeña como subsecretario con aspiración de reemplazarlo. Una convocatoria de admitidos que está prevista se publique este martes 19 de noviembre.
La reunión entre el procurador, Novoa y Cruz duró cerca de media hora y a la salida de la misma quienes esperaban continuar las reuniones de Eljach interpretaron el asunto de dos formas; la primera calificaron de absurda la aparición de Novoa por sus actuaciones en el proceso disciplinario contra el exalcalde, y para otros simplemente se trató de un acto de independencia del nuevo jefe del Ministerio Público con el presidente Gustavo Petro quien lo ternó.
La respuesta de Novoa
Frente a la situación, la Agencia de Periodismo Investigativo, API, se comunicó en la mañana de este lunes vía WhatsApp con el abogado Novoa para plantearle algunos interrogantes.
Estos fueron: ¿Se ha reunido usted con el procurador electo, Gregorio Eljach?, ¿Tiene usted alguna aspiración de nombramiento en la Procuraduría?, ¿Qué tipo de vínculo tiene usted con Saúl Cruz?, ¿Cuál es su actividad económica en estos momentos?.
De inmediato, Novoa respondió: “Con gusto. Cuando tenga un tiempo se las respondo”. Al cierre de la edición de este reportaje, 9pm, Novoa no respondió las preguntas planteadas a las 9 y 10am.
El consentido de Alejandro Ordóñez
La historia de Juan Carlos Novoa Buendía es particular. Se trata de un abogado de 44 años, nacido en Florencia, Caquetá, quien desde su juventud fue apadrinado por el exmagistrado del Consejo de Estado y exprocurador Alejandro Ordóñez Maldonado.
De la mano de Ordóñez quien prácticamente lo trajo a Bogotá, Novoa fue creciendo. Y fue precisamente en el Consejo de Estado en donde hizo sus primeros pinitos.
Era 2002 y al tiempo que culminó sus estudios en derecho en la Universidad Santo Tomás, la misma de Ordóñez, ocupó varios cargos. Primero fue sustanciador, luego auxiliar judicial y también escribiente, hasta 2009, siempre de la mano del entonces magistrado Ordóñez.
Este, en 2009 fue elegido procurador general y una de sus primeras designaciones fue la de Juan Carlos Novoa. El abogado, entre otros cargos, asumió el 16 de febrero de 2009 como procurador auxiliar disciplinario, luego fue procurador delegado para la sala disciplinaria e incluso ocupó al final de la segunda administración de Ordóñez el cargo de secretario privado, esto hasta el 17 de enero de 2017. "Es la mano derecha de Alejandro Ordóñez", recordó otro abogado a esta Agencia.
Por esta razón, la decisión de mayor trascendencia en la administración Ordóñez contra el entonces Gustavo Petro, fue estructurada por Novoa y en esta se señaló que: "La Procuraduría probó que la realización de las conductas referidas fueron cometidas por el señor Alcalde de manera consciente y voluntaria, en la medida en que él sabía que sus decisiones eran irregulares, como lo habían advertido en forma oportuna varias entidades nacionales y distritales, entre ellas la Superintendencia de Industria y Comercio, Superintendencia de Servicios Públicos, la Procuraduría Delegada Preventiva para la Función Pública, la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico, la Contraloría Distrital y el Ministerio de Ambiente".
De secretario privado a contratista millonario
Pocos días permaneció Novoa sin empleo. Mientras Ordóñez fue nombrado por Juan Manuel Santos como embajador de Colombia en la OEA, el 24 de agosto de 2018, su exsecretario privado inició su productiva contratación con el Estado, por punta y punta. Como persona natural y también como persona jurídica con la empresa Novoa Buendía SAS.
Con conocimientos jurídicos en casi todas las áreas: control fiscal, contratación estatal, hidrocarburos, asuntos ambientales, justicia transicional, derecho administrativo, asesor, derecho disciplinario, temas en salud, derecho público, derech, laboral, tributario y minero, por citar algunas de las especialidades para las que fue contratado tanto él como su empresa.
En múltiples entidades públicas: la Universidad de Cartagena, la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ANH, el Sena, en manos de Jorge Londoño del Partido Verde, el ministerio de Justicia, la Personería de Bogotá, la Contraloría de Bogotá, la Superintendencia de Notariado y Registro, el Comando General de las Fuerzas Militares, la Auditoría General de la República, la CAR, la Agencia Nacional de Minería, la Gobernación de Bolívar, Cardique, Positiva Compañía de Seguros, la Unidad Administrativa Especial del Servicio Públio del Empleo y el Hospital Universitario de Santander.
Capítulo especial para los contratos de Novoa con el Senado de la Republica. Cómo persona natural entre 2019 y 2021 con millonarios convenios a fin de prestar servicios jurídicos.
También con su firma Novoa Buendía SAS, varios contratos, desde 2019 hasta la fecha. El más jugoso de ellos firmado con el investigado senador y expresidente del Congreso y miembro del Partido Verde, Iván Name, en líos por denuncias de Sneyder Pinilla de recibir $4.000 millones provenientes de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, UNGRD.
Name, aunque en el Senado hay varios abogados capacitados en planta y como contratistas, le entregó a la firma de Novoa Buendía un contrato por $838.890.500 por los servicios jurídicos de la empresa en 2024.
En concreto, como resalta la propuesta presentada por la firma con una frase repetitiva: "brindar apoyo jurídico", en 11 de las 18 actividades que planteó, que fue aceptada sin reparo alguno y que está vigente hasta el próximo 31 de diciembre.
Contrato que antecedió en esa corporación a otros tres más en 2023 por $145.894.000, $218.841.000 y 437.682.000, todos estos pasaron por el otrora secretario general del Senado, Gregorio Eljach.
Hay expectativa en círculos políticos para establecer si Novoa aspira a volver a la Procuraduría como funcionario o como contratista a título personal o a través de su empresa.
Es la historia de éxito del polifacético abogado Juan Carlos Novoa Buendía, un joven de Florencia, quien de la mano de Alejandro Ordóñez y tras ser artífice de la fallida destitución del entonces alcalde Gustavo Petro como alcalde de Bogotá, ahora ronda al procurador ternado por Petro y elegido en el Congreso.
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