Cucharita: la narcotraficante colombiana que desafió a México y Cuba

Es una historia que desafía las normas, el relato de una mujer que encarnó el poder en su versión más cruda y oscura. Elizabeth Durán Sinisterra, conocida como "Cucharita", un alias que contrasta con su reputación intimidante. Con 55 años, Cucharita construyó un imperio de narcotráfico que podría enfrentar su ocaso en los Estados Unidos.

La captura reciente en el aeropuerto El Dorado de Bogotá fue discreta y, hasta cierto punto, anticlimática. Vistiendo un modesto vestido café, cubierta con una manta azul para combatir el frío en el avión, con zapatillas y el cabello recogido, Cucharita no parecía el personaje que reinó en el submundo criminal que se extiende desde Cali hasta Cuba y México.

Esta oriunda de Santiago de Cali, Valle del Cauca, había sido expulsada de México el 2 de mayo de 2023, después de que se descubrieran sus vínculos con un narcotraficante de alto perfil, conocido como "El Chacal". Un hombre tan poderoso y temido que se le comparaba con el mismísimo Pablo Escobar.

Cucharita enfrenta ahora la extradición al distrito sur de Florida, Estados Unidos, donde se le juzgará por el delito de tráfico de drogas.

Lea también (Ministerio de Salud alerta brote de Covid-19 en la Universidad del Atlántico)

La red que Cucharita tejía era impresionante en su complejidad y alcance. Según las autoridades estadounidenses, colaboraba con el Clan del Golfo en Colombia, quienes le proporcionaban la droga. Luego, empleaba sus conexiones con carteles cubanos para transportar la mercancía hasta México.

Aquí es donde entraba en juego el Cartel de Jalisco Nueva Generación, con quien Cucharita coordinaba el envío de clorhidrato de cocaína a los Estados Unidos.

Una pieza crucial en esta operación era Juan José Santiesteban, mejor conocido como "El Chacal" o "El Pablo Escobar cubano". Este capo, arrestado en Medellín en 2018 y extraditado a los Estados Unidos en 2019, lideraba una organización narcotraficante transnacional con rutas aéreas y marítimas hacia Centroamérica y Estados Unidos.

Además, El Chacal tenía alianzas criminales con la Oficina de Envigado, las AGC, facciones del ELN en Catatumbo, las Autodefensas Unidas del Pacífico y en México con el Cartel de Jalisco Nueva Generación.

Sin embargo, tras la caída de El Chacal, Cucharita tomó su lugar y asumió la coordinación de las operaciones de lavado de dinero para la organización. La pareja se había conocido en Miami, y en poco tiempo Cucharita fue asignada como enlace con el Cartel de Jalisco y administradora de los enormes ingresos de los cargamentos de cocaína en Estados Unidos.

Cucharita gestionaba la logística desde la ciudad de Monterrey, siendo pieza clave en la circulación de enormes sumas de dinero para la organización de "El Chacal".

En suma, una mujer de bajo perfil en el oscuro mundo del narcotráfico que manejó la distribución de drogas en varios países del mundo con diversas organizaciones criminales.

Otras noticias: