Médico acusado por abuso sexual a paciente en cesárea es profesor ahora

En un giro inesperado en el caso de Giovanni Quintella Bezerra, se ha revelado que, a pesar de estar enfrentando graves cargos y estando detenido, logró aprobar el examen de ingreso para estudiar Turismo en la Universidad del Estado de Río de Janeiro. 

Esta información, que emerge en medio de un contexto judicial complejo, fue dada a conocer el 11 de enero por la periodista Juliana Dal Piva a través de 'ICL Notícias' y confirmada por 'O Globo'.

Giovanni Quintella Bezerra, previamente ejerciendo como médico, vio su licencia médica revocada por el Consejo Regional de Medicina del Estado de Río de Janeiro (Cremerj) debido a acusaciones de agresión sexual durante una cesárea en el Hospital da Mulher Heloneida Studart, en Baixada, Brasil. 

Este incidente, que atrajo la atención mundial, ocurrió en 2022 y desde entonces, Bezerra ha estado detenido en la prisión de Bangu, en Gericinó, a la espera de juicio.

Lea también (Sigue escasez de medicamentos para niños con VIH)

El 13 de diciembre del año pasado, el Superior Tribunal de Justicia rechazó una solicitud de habeas corpus presentada por la defensa de Bezerra. Además, se validó un video como evidencia clave en el caso. 

Este video, grabado en el quirófano del hospital por el equipo de enfermería, muestra el momento del delito de abuso sexual. Esta grabación ha sido un factor determinante en la detención y el proceso judicial contra Bezerra.

A pesar de la posición de la Defensoría Pública de Río de Janeiro, que argumenta la ilegalidad de la grabación por falta de consentimiento y autorización policial o del Ministerio Público, la justicia no ha aceptado estos argumentos.

Le recomendamos leer (La fórmula de las EPS para solucionar su crisis financiera)

La participación de Bezerra en el examen de ingreso universitario es un hecho notable, considerando su situación legal actual. Según la Ley de Ejecuciones Penales, las horas de estudio pueden influir en la reducción de la pena de un recluso. 

Sin embargo, para asistir a clases universitarias presenciales, un recluso necesita una autorización judicial específica, según lo estipulado por la Secretaría de Estado de Administración Penitenciaria.

Este caso, que sigue desarrollándose y captando la atención a nivel nacional e internacional, plantea cuestiones complejas sobre la justicia, los derechos de los reclusos y la ética médica. La comunidad sigue a la espera de más desarrollos en este caso judicial y en la trayectoria académica de Giovanni Quintella Bezerra.

Otras noticias