Israel se moviliza en vísperas de decisión crucial de Reforma Judicial

En una demostración de solidaridad y determinación, decenas de miles de israelíes se han unido en un movimiento masivo marchando hacia Jerusalén, en un intento de contrarrestar una controvertida propuesta de reforma judicial. La movilización, que coincide con una votación trascendental, es un claro signo de desafío al primer ministro Benjamin Netanyahu y su gobierno de derecha, los principales patrocinadores del proyecto de ley.

Esta propuesta de reforma, que busca limitar los poderes del tribunal supremo, ha sido objeto de fuertes críticas y ha sumergido al país en una de sus crisis políticas más profundas en la historia reciente. A medida que la tensión política se intensifica, también lo hacen las preocupaciones económicas y las repercusiones diplomáticas, poniendo a prueba las alianzas de Israel con sus socios occidentales.

Los manifestantes, cuyo número aumenta a medida que se acercan a las puertas de la ciudad, marcharon durante días bajo el intenso calor del verano. Portando banderas israelíes y entonando cánticos de protesta, avanzaron a lo largo de la carretera que se retuerce hacia la ciudad sagrada.

Entre los manifestantes se encontraba Ido Golan, un ciudadano del centro de Israel. Acompañado por su pareja y sus dos hijos pequeños, Golan expresó su preocupación por el estado de la democracia en Israel: "La democracia no es tan segura como solía ser. Es muy importante para nosotros y también para ellos saber que hicimos lo que pudimos para salvar la democracia".

Además de los manifestantes que marcharon a Jerusalén, otros tantos llevaron a cabo manifestaciones en otras partes del país. Según los informes, cerca de 100,000 personas protestaron en el corazón de Tel Aviv.

La coalición religioso-nacionalista liderada por Netanyahu sostiene que la reforma es necesaria para lograr un equilibrio en las ramas del poder. Sin embargo, sus detractores denuncian una tramitación precipitada y advierten de potenciales abusos de poder si la ley es aprobada.

Las encuestas reflejan un escepticismo creciente entre los israelíes. Washington ha instado a Netanyahu a buscar un consenso en torno a cualquier reforma y a garantizar la independencia del poder judicial.

La tensión ha llegado incluso al seno de las fuerzas armadas, tradicionalmente una entidad apolítica en la sociedad dividida de Israel. En un hecho sin precedentes, varios ex jefes de seguridad, incluyendo líderes militares, policiales y del Mossad, se han pronunciado en contra de la reforma en una carta abierta al primer ministro. Esta crisis también ha provocado un cisma en la reserva militar, con algunos reservistas amenazando con no servir como protesta contra el proyecto de ley.

En respuesta a las crecientes tensiones, el Ministro de Defensa, Yoav Gallant, dijo el viernes que estaba trabajando para llegar a un consenso. Por otro lado, el Ministro de Energía, Israel Katz, se mantuvo firme en su posición, afirmando que la coalición no se doblegará ante la presión de los reservistas que intentan forzar a un gobierno democráticamente elegido.

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