A pocos días de las elecciones al Congreso del próximo 13 de marzo, los ofrecimientos a los electores abundan. No obstante, uno en particular surgió en los últimos días.
Sucedió en uno de los municipios de la Costa Atlántica, Turbaco, en el departamento de Bolívar. Allí en donde la pobreza pulula, en una de las tantas manifestaciones políticas de la última semana que hacen los aspirantes al Congreso y las consultas internas de los partidos para elegir candidatos a la presidencia.
Los asistentes a las reuniones políticas reciben un bono. Consiste en reclamar un miniperro para una persona, en un sitio de comidas rápidas y pizzas denominado Donde Robert.
Un bono en el que se promociona a Lidio García candidato al Senado que aspira a su cuarta reelección y su fórmula a la Cámara en Bolívar, Silvio Carrasquilla, quien va por su tercera reelección.
Ofrecimiento que para unos es inaceptable y paupérrimo y para otros que se aprovecha de la extrema situación de pobreza de la región. En un contexto, donde según algunos testimonios recogidos, se está tasando el voto hasta en $100.000.
“Esta dádiva de miniperro se viene haciendo no sólo en el municipio de Turbaco, sino en la mayoría de pueblos de Bolívar”, señaló uno de los asistentes a los eventos políticos, a la Agencia de Periodismo Investigativo, API.
Turbaco, está ubicado a 21 kilómetros de Cartagena. Y este ofrecimiento se ha hecho también en Santa Rosa, Turbana y Arjona, entre otros municipios de Bolívar, han señalado otros participantes a las reuniones proselitistas. También en la zona más deprimida de Cartagena, El Pozón y otros barrios circundantes.
Lidio Arturo García Turbay, es de uno de los caciques electorales más importantes de la Costa Atlántica. Ha sido determinante para su colectividad en la aprobación de algunas leyes, la presidencia del Senado y en el ajedrez político que juega su jefe máximo, el expresidente César Gaviria.
De hecho, García es la cabeza de lista por el Partido Liberal. Se trata de un candidato que desde 2006 fue elegido representante en la Cámara por el departamento de Bolívar. En el siguiente periodo aspiró al Senado de la República pero no salió elegido.
Sin embargo, tuvo suerte porque Piedad Córdoba fue destituida y en su reemplazo fue designado al siguiente de la lista, el propio Lidio García, corporación a la que incluso llegó a la presidencia. En los periodos siguientes, fue reelecto como senador.
Su cercanía y popularidad con el electorado es evidente. En la década de los noventa García fue cantante tropical y vallenato.
Saltó a la política e hizo el curso completo. Primero, en 1994 como concejal de El Carmen, Bolívar. Luego diputado por ese departamento, para finalmente completar 16 años en el Congreso de la República y aparecer esta vez como cabeza de lista de la colectividad.
Por su parte, Silvio Carrasquilla, su fórmula, llegó a la Cámara de Representantes en 2014 y encabeza con el número 101, el listado de seis aspirantes avalados por el Partido Liberal en Bolívar.
No obstante, en esta campaña García ha ampliado su radar electoral y busca además de votos en su región, sufragios en Ciudad Bolívar, Suba, y otras localidades en Bogotá, y en Neiva y otros municipios del Huila.
Esta Agencia se comunicó con el senador Lidio García para conocer sus conceptos frente al ofrecimiento a sus posibles electores pero no respondió el mensaje.
Tanto en el caso de García como de Carrasquilla, en anteriores elecciones han obtenido significativas votaciones. Esta vez, a punta de miniperros calientes tienen la expectativa de lograr de nuevo curul en Senado y Cámara.
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