Dos nuevos feminicidios sacuden a la comunidad en el norte y centro del país

En un fin de semana marcado por la violencia de género, dos departamentos colombianos reportan casos de feminicidio que revelan la crítica situación de vulnerabilidad de las mujeres. En Sabanalarga, Atlántico, Nalfi Esther Blanco Olmos, de 34 años, fue encontrada sin vida en la casa donde residía con su pareja, presentando signos de violencia que apuntan a una muerte por causas brutales.

Según informaciones de las autoridades locales, el cuerpo de Nalfi presentaba signos de maltrato en el cuello que sugerían asfixia mecánica, además de indicios de un golpe mortal en la cabeza. El secretario del Interior de Sabanalarga, Edwin García, detalló: "Muere una mujer a causa de la intolerancia de su pareja, al parecer, forcejearon y la muchacha cayó y se golpeó fuertemente la cabeza, quedando sin vida casi de manera inmediata".

El principal sospechoso es su pareja sentimental, quien fue visto con la víctima momentos antes del hallazgo y posteriormente desapareció. Familiares y vecinos del barrio San Carlos alertaron a las autoridades tras el descubrimiento del cuerpo, lo que desencadenó las investigaciones preliminares.

Un caso igualmente dramático ocurrió en Palestina, Caldas, donde Leidy Tatiana Soto Hurtado, de 24 años, falleció después de cinco días de agonía tras ser apuñalada por su esposo. El violento ataque ocurrió en una finca de la vereda La Muleta, donde según vecinos se desarrolló una intensa pelea de pareja que derivó en agresión física.

Leidy sufrió graves heridas que comprometieron sus pulmones y el abdomen, lo que requirió su inmediata hospitalización en el Hospital Santa Sofía de Manizales. El coronel Luis Fernando Sandoval, comandante de la Policía de Caldas, informó que el agresor fue capturado en flagrancia el mismo día de los hechos, inicialmente por violencia intrafamiliar, y que ahora enfrentará cargos por feminicidio.

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Los datos estadísticos revelan una tendencia alarmante de violencia contra las mujeres. En el Atlántico, los feminicidios han pasado de 3 en 2023 a 13 en lo que va de 2024. El departamento ya suma 68 asesinatos de mujeres este año, un incremento significativo comparado con los 44 registrados en todo el 2023. Caldas, por su parte, contabiliza su tercer feminicidio en el mismo periodo.

Esta escalada de violencia pone de manifiesto la urgente necesidad de implementar estrategias más efectivas de prevención y protección. Los casos de Nalfi y Leidy no son incidentes aislados, sino parte de un preocupante patrón de violencia de género que requiere una respuesta integral por parte de las autoridades y la sociedad.

Las investigaciones continúan en ambos casos, mientras las familias de las víctimas buscan justicia y la comunidad exige medidas concretas para detener la violencia contra las mujeres. La muerte de Nalfi y Leidy se suma a una lista cada vez más larga de víctimas, recordándonos la importancia de combatir la violencia machista y proteger la integridad de las mujeres.

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