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Voto en blanco, ¿suma o resta en las elecciones regionales?
Una opción que puede tener un impacto político y social en los comicios regionales de este 29 de octubre.
En medio de las elecciones regionales en Colombia, muchos ciudadanos aún no tienen claro por quién votar o si prefieren optar por el voto en blanco, una figura que permite expresar el inconformismo o la indecisión frente a los candidatos que se postulan a los diferentes cargos públicos.
Sin embargo, el voto en blanco también genera muchas dudas y confusiones entre los electores, pues existen varios mitos y verdades sobre su significado, su efecto y su contabilización. Por eso, es importante conocer qué dice la ley y la jurisprudencia sobre esta opción democrática, que puede cambiar el rumbo de una elección.
Según la sentencia C-490 de 2011 de la Corte Constitucional, el voto en blanco es “una expresión política de disentimiento, abstención o inconformidad, con efectos políticos”, es decir, es una forma de mostrar el rechazo o la falta de identificación con los candidatos que se presentan a las elecciones. El voto en blanco se contabiliza como un voto válido, al igual que los votos por los candidatos o partidos políticos.
Uno de los mitos más frecuentes sobre el voto en blanco es que se suma al candidato que obtiene la mayor votación en las elecciones. Esto es totalmente falso, pues el voto en blanco se cuenta de manera independiente y no favorece ni perjudica a ningún candidato.
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Otro mito es que el voto en blanco nunca gana o que no sirve para nada. Esto tampoco es cierto, pues el voto en blanco puede ganar si constituye la mayoría absoluta de los votos válidos, es decir, el 50% más uno. En ese caso, la Constitución Política establece que se debe repetir la votación con nuevos candidatos, excepto en la segunda vuelta presidencial o cuando ya se hayan repetido las elecciones. El voto en blanco es una forma de ejercer el derecho al sufragio y de enviar un mensaje político a los partidos y a las autoridades electorales.
Un tercer mito es que votar en blanco y anular el voto es lo mismo. Esto tampoco es verdad, pues el voto en blanco es una opción válida y consciente, mientras que el voto anulado es un voto inválido o erróneo. El voto anulado se presenta cuando la tarjeta electoral está mal marcada, dañada o ilegible. El voto anulado no se tiene en cuenta para el conteo de los votos válidos ni para el cálculo del umbral.
Finalmente, se dice que el voto en blanco se contabiliza para el cálculo del umbral. Esto sí es verdadero, pues el umbral es la cantidad mínima de votos válidos que debe obtener una lista para acceder a la cifra repartidora y obtener curules en las corporaciones públicas. Para hallar el umbral, se suman los votos que obtuvo la lista más los votos en blanco. El resultado son los votos válidos.
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