Científicos construyen arca de Noé vegetal, una imponente reserva para proteger la diversidad

Científicos construyen una impresionante reserva de semillas para proteger la diversidad vegetal del planeta. Ubicado en un campo de Inglaterra, este banco de semillas se encuentra bajo tierra, en cámaras acorazadas que mantienen una temperatura constante de -20 grados Celsius. 

Diseñado para resistir inundaciones y bombardeos, este tesoro alberga más de 40,000 especies de plantas silvestres provenientes de todo el mundo, muchas de ellas en peligro de extinción. 

Este proyecto, conocido como el Banco de Semillas del Milenio, MSB, es considerado la iniciativa de conservación más importante jamás realizada, según informó el biólogo David Attenborough, a Newsweek.

El MSB, situado al sur de Londres, es el banco de semillas más grande del mundo y busca preservar las especies vegetales a través de la conservación de semillas para evitar su extinción a largo plazo. 

Dirigido por John Dickie, este centro se inauguró en el año 2000 en Wakehurst, una sucursal de los renombrados jardines botánicos de Kew Gardens en Londres.

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Con aproximadamente 2,500 millones de semillas almacenadas, el banco contiene una amplia variedad de formas, colores y tamaños. Estas semillas pertenecen a más de 40,020 especies diferentes y provienen de 190 países, representando casi el 20% de la flora mundial. 

Se otorga prioridad a las plantas amenazadas, especialmente aquellas afectadas por el cambio climático, así como a las plantas endémicas que solo se encuentran en regiones geográficas específicas.

Además de su importancia ecológica, el MSB también alberga plantas con valor médico o económico para las comunidades locales. El cambio en el uso del suelo para la agricultura y el creciente impacto del cambio climático son algunas de las amenazas que enfrentan las especies vegetales.

“Algunas plantas se adaptarán, otras no, pero al menos estarán aquí, en lugar de desaparecer por completo", explica John Dickie.

El proceso de conservación de las semillas en el MSB se basa en tecnologías utilizadas en la conservación de especies cultivadas. Después de recibir nuevas semillas semanalmente, se procede a secarlas, limpiarlas y congelarlas. 

Una vez congeladas, estas semillas pueden almacenarse durante décadas e incluso siglos. Todo este proceso se realiza a la vista del público en el laboratorio acristalado de Wakehurst, donde un equipo de aproximadamente 20 investigadores y voluntarios, entre ellos Lucy Taylor, trabaja incansablemente para preservar las semillas, como las de la especie albizia polyphylla llegadas de Madagascar.

El Banco de Semillas del Milenio representa un esfuerzo valioso y crucial para salvaguardar la biodiversidad vegetal del mundo. A medida que la humanidad enfrenta desafíos cada vez mayores en el ámbito ambiental, este tesoro de semillas se convierte en un baluarte de esperanza, asegurando que la diversidad y la vida en nuestro planeta sigan prosperando en el futuro.

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