Irina Shayk causó revuelo en semana de la moda en Londres, tras salir a la pasarela con un ojo morado

Irina Shayk, reconocida modelo internacional, fue el centro de todas las miradas en la reciente Semana de la Moda de Londres. Su aparición en la pasarela de la marca Mowalola, con un deslumbrante vestido largo metálico estampado con letras rojas, escote sideboob y una espalda descubierta, marcó un momento icónico. Su cabello, libre y húmedo, ofreció una apariencia desenfadada y despeinada, complementando el audaz diseño.

Sin embargo, fue un elemento inesperado en su maquillaje lo que desencadenó una oleada de reacciones entre los asistentes y posteriormente en las redes sociales: un ojo aparentemente morado, como si tuviera un moretón. Este detallado maquillaje, lejos de ser un accidente o una señal de alarma, fue una elección estética deliberada por la casa de modas.

La inspiración detrás de esta elección proviene de la película "Crash", y como parte de la temática del desfile, las modelos aparecieron como si hubieran sido parte de accidentes automovilísticos. Esta representación, aunque creativa y artística, no fue bien recibida por todos.

Las redes sociales se inundaron de críticas tras el desfile, con muchos usuarios argumentando que tal representación podría contribuir a la normalización de la violencia en la sociedad. 

Se expresaron preocupaciones sobre la insensibilidad de usar maquillajes que imitan lesiones, calificándolo como un potencial insulto hacia las verdaderas víctimas de la violencia.

La pasarela, diseñada para impactar y generar conversación, ciertamente logró su objetivo, aunque tal vez no de la manera que Mowalola esperaba.

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