Trabajadores de principal hospital de Riohacha entran en paro por crisis financiera

El Hospital Nuestra Señora de los Remedios, ubicado en Riohacha, se encuentra sumido en una profunda crisis financiera que ha llevado a sus trabajadores a anunciar un cese completo de actividades. 

Este movimiento sindical, liderado por Darinel Suárez Barros y Roger Romero Romero, representantes de la base sindical del Sindicato de Trabajadores de la Salud (Sindes), ha puesto en alerta a la comunidad y a las autoridades locales.

Los trabajadores del hospital, a través de un comunicado firmado por los líderes sindicales, han expresado su preocupación por la insostenibilidad financiera del centro asistencial. 

Según indican, el hospital maneja una nómina que supera los 1,500 millones de pesos mensuales, pero los ingresos obtenidos en enero apenas alcanzaron los 280 millones, lo que apenas representa un fragmento de los costos operativos.

Esta crisis no solo afecta a los trabajadores, sino que también compromete la calidad de la atención que se brinda a los pacientes. 

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Los sindicalistas han señalado diversos errores administrativos que han contribuido a la situación actual, incluyendo la falta de actualización de la firma electrónica necesaria para la facturación, un problema que ha obstaculizado la generación de ingresos.

En vista de la paralización anunciada, que comenzará a las cero horas del próximo martes, los dirigentes sindicales han solicitado a la gerente del hospital, Mariangelica Martínez, la implementación de un plan de contingencia para garantizar la atención de emergencias vitales durante el periodo de protesta.

La administración del hospital, que recibió una institución financieramente viable en 2020, ahora enfrenta el reto de manejar una entidad que lucha por mantenerse a flote. 

Los retrasos en el pago de salarios y honorarios a médicos especialistas, personal administrativo y asistencial son solo una parte del panorama que describe la difícil situación que vive el Hospital Nuestra Señora de los Remedios.

La comunidad de Riohacha y los pacientes que dependen de los servicios de este hospital esperan que se encuentren soluciones prontas a esta crisis, que no solo amenaza la estabilidad laboral de cientos de trabajadores, sino que también pone en riesgo la salud y bienestar de la población que requiere de sus servicios.

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