Se agota el tiempo en rescate del perro Wilson que ayudó a encontrar niños perdidos en selva del Guaviare

Con cada día que pasa, la esperanza de encontrar a Wilson, el heroico perro que jugó un papel crucial en el rescate de cuatro niños en la selva del Guaviare, parece desvanecerse en las sombras de la densa vegetación tropical. 

A pesar de los esfuerzos de un equipo de búsqueda altamente especializado y tecnología avanzada, el silencio del bosque sigue siendo la única respuesta a sus llamados desesperados.

Hace apenas unas semanas, Colombia entera respiraba aliviada ante el rescate exitoso de cuatro jóvenes indígenas perdidos en la implacable selva del Guaviare durante más de 40 días. 

Aquella misión, apodada "Operación Esperanza", fue un despliegue sin precedentes de recursos y tácticas que involucró a 150 miembros del Comando de Operaciones Especiales (Coes) de las Fuerzas Militares.

El rescate, que parecía más una misión contra reloj, contó con helicópteros, perros rastreadores, audios por altavoces y un arsenal de estrategias para dar con el paradero de los menores. 

Sin embargo, fue el valiente Wilson, un pastor belga malinois, quien se convirtió en el emblema de la operación. Con cada objeto y huella que encontraba, Wilson mantenía viva la esperanza, no solo de los rescatistas sino de toda Colombia.

Hoy, la misma nación que celebró el regreso de sus pequeños, mantiene la fe intacta por el retorno de Wilson. Pero, la cruda realidad de la selva y el paso del tiempo parecen jugar en contra del heroico canino. Según una fuente de las Fuerzas Militares, cada día que pasa se van desvaneciendo las esperanzas de encontrar a nuestro canino con vida".

En este desafío por encontrar a Wilson, la perseverancia del soldado profesional Cristian David Cuaran Lara es digna de destacar. Lara, quien ha compartido casi un año de su vida con Wilson, continúa la búsqueda en compañía de 30 comandos más. 

Incluso se ha recurrido a la tecnología de aviones plataforma con sensores infrarrojos que detectan el calor de personas o animales. Sin embargo, hasta ahora, la selva sigue guardando en secreto el paradero de Wilson.

La búsqueda de Wilson puede continuar durante unos días más, pero ante la ausencia de resultados, la realidad se impone. El desgaste físico y emocional es considerable, y los comandos merecen un descanso y volver con sus familias. "A un compañero no se abandona", afirma la fuente, pero en el mismo tono realista agrega que si Wilson no es encontrado, "la búsqueda será suspendida".

La historia de Wilson y su valor en la "Operación Esperanza" no será olvidada. Se planea la creación de un busto en homenaje y agradecimiento al canino por su valiosa contribución. También se está buscando a Drugia, la madre de Wilson, para rendirle un homenaje simbólico a su valiente hijo durante un evento en la Casa de Nariño, aunque este se ha aplazado.

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