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Alerta ambiental: Ideam confirma que comenzó el Fenómeno del Niño en Colombia y durará hasta enero

Así serán las condiciones climáticas en Colombia a final del año y a comienzos de 2024.

Lluvias Bogotá
Por Agencia Periodismo Investigativo | Sáb, 04/11/2023 - 12:20 Créditos: Alcaldía de Bogotá

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia, Ideam, ha confirmado la presencia del fenómeno de El Niño en el territorio nacional, lo cual se traduce en una alta probabilidad de condiciones climáticas más cálidas y secas hacia finales del año 2023 y comienzos del 2024. 

Este evento, de reconocida periodicidad y efectos significativos en el clima global, se espera que se intensifique entre noviembre de 2023 y enero de 2024 con una probabilidad de un 75% al 85% de que sea más fuerte de lo usual, sugiriendo un posible impacto directo en la variabilidad de las precipitaciones y temperaturas en diversas regiones de Colombia.

La declaración oficial por parte de Ghisliane Echeverry Prieto, directora de la entidad, y la confirmación de Giovanni Jiménez Sánchez, subdirector de meteorología, subrayan la importancia de preparación y adaptación ante los cambios esperados. 

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La Oficina de Pronósticos del Ideam, liderada por Diana Carolina Rueda, ha enfatizado que aunque el país ha experimentado una temporada extendida de lluvias, la llegada de El Niño representará una importante disminución de estas, alertando sobre el potencial de un tiempo considerablemente más seco.

La caracterización de El Niño como un fenómeno climático y oceánico que conlleva el calentamiento anómalo de las aguas del Pacífico y las alteraciones en patrones de viento y corrientes, fue respaldada por la Organización Meteorológica Mundial, que también ha confirmado su inicio.

Las regiones de Colombia que podrían verse más afectadas son la Región Caribe, la Región Andina y el Sur del Pacífico, mientras que la Orinoquía, aunque menos susceptible, no está exenta de posibles consecuencias. 

Ante estos pronósticos, el Ideam recomienda medidas de precaución y la conservación de recursos hídricos, advirtiendo sobre el impacto en la agricultura y la seguridad alimentaria. Se hace énfasis en la importancia de la prevención de incendios y el autocuidado en tiempos de altas temperaturas.
 

 

 

 

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