Alcalde de Bogotá advierte posibles aumentos en la factura del agua

El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ha declarado que el racionamiento de agua en la ciudad es "inevitable" debido a la crítica falta de lluvias y al estado alarmante de los embalses de Chuza y San Rafael.

Durante una entrevista en Mañanas Blu con Néstor Morales, Galán destacó que si no se implementan medidas adecuadas, la situación podría agravarse aún más en el próximo año, haciendo un llamado urgente tanto a la ciudadanía como al Gobierno nacional para enfrentar esta crisis.

Medidas actuales y almacenamiento

Galán detalló que las medidas actuales, que incluyen cortes de agua por localidades y turnos, han permitido almacenar casi 19 millones de metros cúbicos en el embalse de Chuza. Estas restricciones han sido cruciales para manejar la escasez de agua que enfrenta la ciudad desde hace varios meses.

El alcalde también advirtió que se prevé una temporada seca similar a la actual para los meses de enero, febrero y marzo de 2025. En respuesta, la administración local está explorando alternativas a largo plazo para garantizar un abastecimiento adecuado de agua en el futuro.

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La situación se ve agravada por la falta de lluvias esperadas para la próxima semana. Ante este panorama, se están considerando medidas adicionales, como el endurecimiento de las restricciones de consumo de agua, para mitigar el impacto de la crisis.

Impacto en la factura de agua

Una de las medidas propuestas es el ajuste en la facturación del agua. La Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA) está evaluando un aumento en la tarifa que podría impactar directamente en los hogares bogotanos. Según Galán, la tarifa plena adicional podría aplicarse a partir de los nueve metros cúbicos en dos meses para los estratos cuatro, cinco y seis, y a partir de 11 metros cúbicos para los estratos uno, dos y tres. Este cambio podría resultar en un aumento de cerca de $3.000 en la factura del agua.

Para aliviar la presión sobre los embalses, se planea aumentar la capacidad del sistema norte de la ciudad para traer más agua del río Bogotá, con el objetivo de incrementar el suministro en hasta 10.5 metros cúbicos el próximo año.

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