Nueva polémica envuelve al hijo del presidente Gustavo Petro tras declaración de su exesposa

La controversia rodea a la familia presidencial, específicamente a Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente Gustavo Petro Urrego, después de que este decidiera no colaborar con las autoridades, a pesar de haber manifestado anteriormente su intención de proporcionar detalles esenciales sobre supuestas corrupciones en las que estaría implicado.

No obstante, una figura clave en esta situación es Daysuris Vásquez, exesposa de Nicolás. Tras haber sido señalada por delitos como lavado de activos y violación de datos personales, debido al hackeo del teléfono móvil de Laura Ojeda, actual pareja de Nicolás, Vásquez decidió romper el silencio.

A través de una publicación en Twitter, Vásquez refutó las afirmaciones de su exesposo, quien alegó haber sido presionado por la Fiscalía con el fin de manchar la imagen de su padre, el mandatario nacional. En respuesta a las declaraciones del exdiputado del Atlántico sobre las supuestas presiones, la mujer tuiteó: "Y sin presiones de nadie, ¡soy testigo!", desatando un torbellino de reacciones en la red.

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Es importante recordar que, desde el 21 de agosto de 2023, se especulaba sobre la posible información que Vásquez poseería acerca de las decisiones de Nicolás Petro. La mujer ya había insinuado que él podría retractarse en su compromiso con la Fiscalía, dejando en claro su determinación de seguir cooperando con la justicia.

Al respecto, Alait Freja, abogado de Vásquez, confirmó que ella había proporcionado a la Fiscalía evidencias, entre las que se incluyen conversaciones, grabaciones y documentos, que supuestamente vincularían a Nicolás con fondos de origen cuestionable y la financiación de la campaña presidencial de su padre.

Por su parte, Nicolás, en una serie de publicaciones en Twitter, replicó las mismas palabras que su padre, Gustavo Petro, había utilizado previamente: “Hoy inicia la lucha de mi vida... Decidí levantarme y no arrodillarme ante el verdugo”. Asimismo, reiteró su decisión de no seguir con el acuerdo que había hecho con el fiscal Mario Burgos, contradiciendo lo que había declarado anteriormente sobre su voluntad de colaborar con la justicia por el bienestar de su familia y de su hijo por nacer.

El panorama se torna aún más incierto con estas recientes declaraciones, que añaden más leña al fuego en este complejo caso que involucra a figuras clave en el ámbito político colombiano. Es evidente que, en los próximos días, los ojos del país estarán puestos en el desarrollo de este asunto y en las decisiones que tome la justicia.
 

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