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Las sombras de Piedad Córdoba: un escrutinio judicial detallado tras 15 años de incertidumbre
Pruebas que comprometen a la senadora del Pacto Histórico adportas de cita ante la Corte Suprema de Justicia.
Una acumulación de pruebas formidables incluyendo informes financieros, testimonios de antiguos miembros de la guerrilla, personas de confianza y escuchas telefónicas han conducido al supremo tribunal a convocar a la senadora Piedad Córdoba a una versión libre esta semana.
El 20 de julio pasado, la senadora Córdoba asumió su sexto mandato en el Congreso, continuando su prolongada carrera política. Sin embargo, este nuevo año legislativo trae consigo un llamado sin precedentes de la justicia para que dé explicaciones en un caso judicial que lleva más de una década sin resolverse.
El viernes próximo, la Corte Suprema de Justicia la ha citado a una versión libre en un proceso por presuntos delitos de rebelión, enriquecimiento ilícito y lavado de activos. Como es sabido, el caso destapa que las autoridades han tenido durante años evidencias de los posibles lazos de Córdoba con la antigua guerrilla de las Farc. Sin embargo, hay más.
El Espectador ha obtenido acceso a todas las pruebas que se encuentran en la Sala de Instrucción en el despacho de la magistrada Cristina Lombana. Además de detalles de la supuesta relación entre Córdoba y el secretariado de las Farc , se descubre una ruta poco explorada hasta ahora: un supuesto enriquecimiento ilícito de la senadora y su familia, logrado a través del cabildeo para empresarios ante el Gobierno venezolano. Entre las pruebas se encuentran informes inéditos de inteligencia, análisis de las finanzas de la congresista y de 16 miembros de su familia, y escuchas de comunicaciones.
Estos testimonios incluyen a su ex asesor Andrés Vásquez y a la excandidata presidencial Íngrid Betancourt, cuyas declaraciones parecen comprometer a la senadora del Pacto Histórico.
Vásquez, testigo y protagonista de los movimientos de la senadora que la Corte está investigando, podría proporcionar luz sobre cómo, en medio de la aparente afinidad de Córdoba con las Farc y su creciente cercanía con el gobierno chavista, ella y su familia amasaron su fortuna.
El análisis de las finanzas de la senadora y los testimonios recopilados destacan movimientos sospechosos, incluyendo millonarias discrepancias en la compra de un apartamento en el centro de Bogotá.
La investigación también destaca las actividades de Piedad Córdoba relacionadas con la exguerrilla Farc, a pesar de que las pruebas directas han sido hasta ahora inadmisibles en los tribunales debido a problemas con la cadena de custodia.
A pesar de las dificultades, la magistrada Lombana parece haber encontrado una nueva ruta de investigación que no se basa en pruebas inadmisibles. Esto incluye la investigación de expedientes de otras operaciones donde se incautaron dispositivos a las FARC, dando nuevas pistas sobre el nivel de presunto involucramiento de Córdoba con la guerrilla.
Las pruebas recogidas por Lombana también incluyen testimonios que sugieren una relación entre Córdoba y las guerrilla. Por ejemplo, un testimonio de un infiltrado en la guerrilla quien conoció a la senadora en una reunión política, y aseveró que las Farc estaban "preparando" a Córdoba para ser presidenta de Colombia.
Además de las declaraciones de ex rehenes como Gloria Polanco y Jorge Gechem, recientemente se ha sumado el testimonio de Íngrid Betancourt, excandidata presidencial, quien afirmó que en la década de los 90, cuando ambas compartieron en el Congreso, eran evidentes los lazos de Córdoba con la guerrilla.
Estas y otras pruebas se suman a un caso judicial que lleva más de una década en curso y que, con el paso de los años, se va oscureciendo cada vez más. La cita a versión libre de la senadora la próxima semana puede ser un momento clave en este proceso y en su carrera política, en el que la luz finalmente se arroje sobre las alegaciones que han rodeado a Piedad Córdoba durante años.
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