Juez de control de garantías ordena la libertad de Álvaro Luis Ospino Illera, alias ‘La Negra Dominga’

En las últimas horas, tras la realización de audiencias preliminares, un juez de control de garantías determinó la liberación de Álvaro Luis Ospino Illera, conocido como ‘La Negra Dominga’, quien había sido capturado por presunta tenencia ilegal de un arma de fuego.

Su detención se llevó a cabo en un edificio ubicado en el norte de Barranquilla por parte de unidades de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín) de la Policía Nacional, provenientes de Bogotá.

El procedimiento tuvo lugar en el edificio Torres Dilugano, situado en la calle 79 con carrera 58. Ospino Illera había cobrado notoriedad desde octubre de 2023, cuando su hijo adoptivo, Jhonatan Ospino Illera, perdió la vida durante una celebración en Punta Roca, un balneario del municipio de Puerto Colombia. La captura fue ejecutada por las autoridades, quienes lo señalaron de portar un arma sin la documentación legal correspondiente.

Sin embargo, durante la audiencia, los abogados defensores presentaron documentación que acreditaba la legalidad de la tenencia del arma que llevaba al momento de su detención.

Esta prueba llevó al juez a considerar que no existían elementos suficientes para sostener la acusación de porte ilegal, motivo por el cual decidió concederle la libertad.

También surgieron versiones que indicaban que la decisión del juez estuvo relacionada con la discrepancia en la cantidad de cartuchos permitidos en el permiso de porte de Ospino Illera.

Se informó que el número registrado en los documentos difería de la capacidad real del arma incautada, lo que habría llevado al juez a desestimar la acusación en su contra.

Antecedentes y derecho de petición

En marzo de 2024, Ospino Illera envió un derecho de petición al diario El Heraldo, en el que negó cualquier relación con los atentados contra la familia Vega Daza, cuyos miembros fueron asesinados en hechos ocurridos en Villa Campestre en junio de 2023 y posteriormente en El Saler, al sur de Valencia, España.

En su comunicación, el hombre de 38 años, nacido en Valencia, Estado de Carabobo, Venezuela, reconoció haber cumplido una condena en su país de origen por un homicidio ocurrido doce años atrás. Afirmó que había saldado su deuda con la familia de la víctima, con la justicia y con la sociedad, por lo que, según él, no tenía pendientes con la ley.

Además, solicitó a la Fiscalía General de la Nación, a la Procuraduría y a la Presidencia de la República la expedición de certificados que ratificaran su desvinculación con los homicidios atribuidos al ‘Clan Vega Daza’.

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En el documento, hizo referencia a una petición similar presentada en octubre de 2023 ante la Fiscalía Seccional del Atlántico y otras entidades.

En su mensaje, expresó que aún no se había recuperado de la muerte de su sobrino adoptivo, Jhonatan José Ospino Illera, y manifestó su descontento por la persistencia de señalamientos en su contra.

Se refirió al asesinato de Roberto Vega Daza, alias Beto, en Valencia, España, caso en el que su nombre había sido mencionado como presunto responsable.

Según Ospino Illera, la muerte de Vega Daza estaría relacionada con la pérdida de un cargamento de droga y habría sido ordenada por miembros de la organización criminal a la que este pertenecía.

En su pronunciamiento, insistió en que no guardaba rencor ni deseos de venganza contra ninguna persona y que los ataques y asesinatos reportados eran consecuencia de actividades relacionadas con el narcotráfico.

Negó cualquier vínculo con grupos criminales y sostuvo que, de acuerdo con las autoridades y medios de comunicación españoles, los responsables de los homicidios eran organizaciones dedicadas a actividades ilícitas.

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