Abogado suspendido por la Comisión Judicial por expresión a defensora del ICBF: “Usted me excita”

Debido a una expresión inapropiada dirigida a una defensora de familia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) durante una audiencia de conciliación en una Unidad de Reacción Inmediata (URI) en Santander de Quilichao, Cauca. El comentario, realizado en presencia de un menor de edad, generó una denuncia que culminó en la imposición de una sanción disciplinaria.

El incidente ocurrió cuando el abogado Delbert Mayorga expresó una frase de connotación inadecuada a la defensora de familia Martha Polanco. Ante esto, la funcionaria exigió respeto, pero, según su relato, el abogado desestimó la gravedad de sus palabras y continuó con una actitud burlesca. Además, dirigió expresiones irrespetuosas hacia la madre del menor presente en la audiencia, lo que agravó la situación.

La defensora de familia interpuso la denuncia, lo que llevó a la Comisión de Disciplina Judicial a evaluar el caso.

Durante el proceso, el abogado intentó justificar su conducta y presentó disculpas, pero estas fueron consideradas insuficientes.

En su declaración ante la Comisión, Mayorga admitió haberle faltado al respeto a la funcionaria, reconociendo que su comportamiento no fue adecuado para el ejercicio de su profesión.

Además de sus comentarios, el abogado incurrió en otro acto cuestionable al entregar en calidad de "regalo" una prenda de vestir al menor involucrado en el proceso, lo que también fue señalado en la investigación disciplinaria.

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En su fallo, la Comisión de Disciplina Judicial resaltó que la conducta del abogado no correspondía a la ética profesional exigida a los juristas en el ejercicio de sus funciones.

Se subrayó que el respeto, la seriedad y la mesura son principios esenciales en el ámbito jurídico, y que manifestaciones de contenido inapropiado en un contexto profesional no pueden ser toleradas.

Mayorga, en un intento por evitar la sanción, argumentó que su actividad como abogado era su sustento y solicitó que la suspensión de su tarjeta profesional fuese reemplazada por una censura.

En su declaración final, utilizó una metáfora al afirmar que, en adelante, no "agrediría a persona alguna ni siquiera con el pétalo de una rosa". Sin embargo, esta apelación no tuvo éxito, y la Comisión ratificó la suspensión de su licencia profesional por un período de dos meses.

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