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Néstor Lorenzo y su fe para retomar el camino de Selección Colombia: su historia con la Virgen de Luján
El técnico de Colombia fue a misa en Barranquilla. Busca superar el bache del combinado nacional.
El director técnico de la selección nacional de fútbol de Colombia, Néstor Lorenzo, asistió en la mañana en las últimas horas a una ceremonia religiosa realizada en una iglesia ubicada en el norte de Barranquilla.
La jornada espiritual tuvo lugar a menos de 48 horas del encuentro clasificatorio frente al combinado de Paraguay, correspondiente a las eliminatorias sudamericanas para la Copa Mundial de la FIFA 2026.
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La actividad se desarrolló en la parroquia Santa Teresita del Niño Jesús, situada en el barrio Villa Santos, cercano al hotel donde el equipo colombiano se encuentra concentrado.
La presencia del entrenador fue registrada por asistentes al acto, entre ellos el exfutbolista profesional Martín Arzuaga, quien publicó en sus redes sociales una imagen del seleccionador nacional en compañía de otros creyentes, durante un momento de la eucaristía en el que sostenía una bandeja utilizada en la liturgia.
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El técnico, de nacionalidad argentina, es conocido en el entorno deportivo por mantener una práctica constante de su fe católica. En medio de una serie de resultados desfavorables en el actual proceso eliminatorio —tres derrotas consecutivas, incluida la más reciente frente a Brasil—, Lorenzo decidió asistir al servicio religioso.
La acción se interpreta como un espacio de recogimiento personal y una búsqueda de fortaleza espiritual ante los desafíos inmediatos que enfrenta como responsable del equipo.
El compromiso contra Paraguay, programado para el martes en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, representa un momento definitorio en las aspiraciones del seleccionado colombiano.
A la fecha, Colombia ocupa la sexta posición en la tabla de clasificación con un total de 19 puntos. Esta casilla otorga el último cupo directo al certamen mundial.
Por su parte, Paraguay se encuentra un puesto más arriba, en la quinta posición, con 20 unidades. Bolivia, en séptimo lugar, sigue en competencia con 13 puntos, a seis de diferencia del conjunto colombiano.
Lorenzo, quien en reiteradas ocasiones ha manifestado devoción por la Virgen de Luján, figura central del catolicismo argentino, acudió al templo sin indumentaria oficial del equipo nacional.
El encuentro del martes ha sido catalogado por diversos sectores como determinante en la ruta hacia la clasificación.
El resultado podría modificar las posiciones en la tabla general y condicionar el panorama de los equipos implicados en la disputa por los cupos sudamericanos al torneo internacional, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá.
La Virgen de Luján y su historia
La Virgen de Luján constituye una de las advocaciones marianas de mayor arraigo dentro del catolicismo en América Latina.
Su historia, originada en el siglo XVII en el actual territorio argentino, ha trascendido generaciones y fronteras, consolidándose como símbolo religioso, cultural y social.
La figura, venerada como patrona de la República Argentina, está profundamente ligada a la identidad espiritual del país y a las prácticas devocionales de millones de creyentes, tanto en el ámbito local como en comunidades de emigrantes.
Origen del culto
El punto de partida de la devoción a la Virgen de Luján se remonta al año 1630, cuando una pequeña imagen de la Virgen María llegó por barco desde Brasil, con destino final en Santiago del Estero.
El encargo había sido realizado por un hacendado portugués que deseaba fortalecer la fe en su región mediante una representación de la Inmaculada Concepción.
La imagen, tallada en terracota y de aproximadamente 38 centímetros de altura, fue transportada en una carreta junto con otra imagen mariana.
Según narraciones documentadas por testigos de la época y transmitidas por tradición oral, al llegar a la estancia de don Rosendo de Trigueros, situada en la zona del río Luján —provincia de Buenos Aires—, los animales que arrastraban la carreta se detuvieron de forma inexplicable y se negaron a continuar el trayecto.
Luego de múltiples intentos por reanudar el viaje sin éxito, se decidió retirar la pequeña imagen de la Virgen. En ese momento, los bueyes reanudaron la marcha sin dificultad, lo que fue interpretado por los presentes como un signo divino de que la figura debía permanecer en ese lugar.
Primer santuario y expansión del culto
La imagen fue conservada inicialmente en la estancia de Trigueros y luego trasladada a la casa de un esclavo africano liberado, llamado Manuel, quien dedicó su vida al cuidado de la Virgen.
Años después, se levantó una ermita que comenzó a recibir visitas constantes de fieles. En 1685, el sacerdote Pedro Montalvo promovió la construcción de una capilla más formal.
El crecimiento de la devoción llevó, en el siglo XIX, a la edificación de un templo mayor, que fue reemplazado posteriormente por la actual basílica, cuya construcción comenzó en 1887 y finalizó a mediados del siglo XX.
El santuario, ubicado en la ciudad de Luján, se transformó en uno de los principales centros de peregrinación del país. Cada año, cientos de miles de personas participan en caminatas desde distintos puntos del territorio argentino para rendir homenaje a la Virgen. La manifestación más numerosa es la llamada Peregrinación Juvenil a Luján, que se celebra anualmente desde 1975.
Reconocimiento institucional y papal
En 1930, al cumplirse el tricentenario de su permanencia en suelo argentino, el papa Pío XI autorizó la coronación canónica de la imagen. Más adelante, en 1944, el papa Pío XII la declaró oficialmente “Patrona de la Argentina, del Paraguay y del Uruguay”.
Su figura también es reconocida como protectora de las fuerzas armadas, de los transportistas y de diversos colectivos sociales, entre ellos los migrantes argentinos en el exterior.
La imagen original se conserva actualmente en un camarín especial dentro de la basílica de Luján, resguardada por medidas de conservación y seguridad.
Su apariencia ha sido modificada levemente a lo largo del tiempo debido a restauraciones, aunque mantiene su forma y dimensiones originales.
Se le atribuyen numerosos milagros, entre ellos curaciones, auxilios en momentos de peligro y consuelo en situaciones de desesperanza.
Dimensión simbólica y cultural
Más allá del aspecto religioso, la Virgen de Luján ha sido incorporada como emblema identitario en múltiples expresiones de la cultura argentina.
Su imagen ha sido reproducida en objetos litúrgicos, obras de arte, escudos institucionales, y hasta en estandartes deportivos.
Figuras destacadas del ámbito político, militar y artístico han manifestado públicamente su veneración por ella. Su presencia también ha sido constante en momentos de crisis o conmemoración nacional.
En el ámbito internacional, su devoción ha crecido con la diáspora argentina. Capillas dedicadas a la Virgen de Luján existen en ciudades como Madrid, Nueva York, Roma, Montreal y Sídney.
El papa Francisco, oriundo de Buenos Aires y primer pontífice latinoamericano, ha demostrado reiteradamente su cercanía espiritual con esta advocación mariana, conservando incluso una imagen de ella en su residencia vaticana.
Varios personajes públicos, tanto del ámbito religioso como político, deportivo y artístico, han expresado públicamente su devoción a la Virgen de Luján. A continuación, se enumeran algunos de los más reconocidos:
1. Papa Francisco
Jorge Mario Bergoglio, actual pontífice de la Iglesia católica y primer papa argentino, ha manifestado en múltiples ocasiones su fuerte devoción a la Virgen de Luján. Antes de ser elegido Papa, visitaba con frecuencia el santuario en la provincia de Buenos Aires. En el Vaticano conserva una imagen de esta advocación en su residencia. Además, durante su papado ha promovido su figura en actos litúrgicos y mensajes dirigidos a los fieles argentinos.
2. Diego Armando Maradona
El exfutbolista y director técnico argentino, fallecido en 2020, visitó el santuario de Luján en varias ocasiones. En entrevistas y registros periodísticos, expresó su fe en la Virgen, a quien atribuía protección personal y familiar, especialmente en momentos difíciles de su vida.
3. Lionel Messi
Si bien no es un devoto explícito en todos los foros públicos, Messi ha estado vinculado a actos religiosos relacionados con la Virgen de Luján y ha enviado ofrendas al santuario.
También ha recibido imágenes bendecidas de la Virgen en ceremonias conmemorativas realizadas por clérigos argentinos.
4. Juan Domingo Perón y Eva Perón
Durante el primer gobierno peronista, la figura de la Virgen de Luján fue impulsada como símbolo de unidad nacional. Evita, en particular, asistió a ceremonias religiosas en el santuario y apoyó actos públicos donde se promovía su devoción. En el contexto político de la época, su imagen fue utilizada como representación espiritual del pueblo argentino.
5. Mercedes Sosa
La cantante tucumana, figura fundamental del folclore latinoamericano, era devota de la Virgen de Luján. Participó en varias celebraciones religiosas y fue parte de homenajes dedicados a la Virgen.
6. Carlos Tévez
El exfutbolista argentino ha manifestado en varias entrevistas su devoción católica, haciendo mención particular de la Virgen de Luján. En distintas etapas de su carrera, ha realizado visitas al santuario para agradecer logros personales o pedir por su familia.
7. Sergio Massa
El dirigente político y excandidato presidencial ha sido fotografiado en actos oficiales y privados relacionados con la Virgen de Luján. También ha asistido a misas en la basílica y ha acompañado eventos religiosos conmemorativos.
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