Foto tomada de: Agencia EFE
Por: Lucas Cardona Camargo
La noticia de la semana en el fútbol mundial fue el retorno de la Bundesliga en Alemania. Durante dos meses no hubo competencia deportiva y, en consecuencia, tampoco transmisión de partidos por televisión.
Pero más allá de los resultados en los partidos de primera y segunda división, y del análisis sobre la forma como operaron los protocolos de sanidad en los juegos a puerta cerrada en los distintos estadios, el suceso de la primera jornada en plena crisis del coronavirus fue la lesión de doce jugadores. Esa señal encendió las alarmas en Colombia, en expectativa por la reanudación del campeonato.
La novedad del elevado número de lesionados en Alemania ya fue advertida por los médicos de los distintos clubes, que de todos modos tienen claro que si no se trabaja con los jugadores en sesiones de entrenamiento con mucha responsabilidad individual, esta fase de desacondicionamiento y falta de competencia puede derivar en lesiones, la mayoría musculares.
El reporte oficial de lesionados es amplio y en su mayoría a causa de dolencias derivadas de atrofías, pérdida de masa o sobre entrenamiento de los futbolistas, que son analizadas por los cuerpos médicos de los clubes.
Giovanni Reyna y Thorgan Hazard del Borussia Dortmund aquejados de lesión muscular. Sebastian Rudy e Ihlas Bebou del Hoffenheim, registraron situación médica similar. Igual suerte corrieron, Ciljan Skejelbred del Hertha Berlin, Klaus Gjasula del SC Paderborn 07, Marcus Thuram del Borussia Monchengladbach, Benno Schmitz del FC Colonia, Marco Russ del Eintracht Frankfurt y André Hahn del FC Ausburgo
En el caso del futbolista, Jean Clair Todibo del Schalke 04, tuvo lesión de tobillo. Lars Bender del Bayer Leverkusen se afectó su pie derecho. Los médicos precisaron que la mayoría no fueron lesiones graves pero causaron preocupación.
Ante los resultados médicos del retorno al fútbol en el primer país en momentos de pandemia, fisioterapeutas, médicos deportivos y otros profesionales de la salud deportiva, también prevalece el consenso de que lo ideal es que se cumpla con un proceso escalonado de actividad física, en el que cada caso demanda una dinámica específica de ejercicio activo.
El médico Gustavo Portela, con 34 años de trabajo en el Deportivo Cali desde que empezó a asistir a los jugadores de las reservas y categorías inferiores, manifestó inicialmente que desde el 15 de marzo, en las horas previas a que el gobierno Duque impartiera la orden de la cuarentena obligatoria, se puso en marcha una planificación médica para que los jugadores trabajen adecuadamente sus sesiones de entrenamiento a través de las plataformas digitales.
Además, de manera complementaria, se estableció un grupo interdisciplinario de fisioterapeutas, acondicionadores físicos, psicólogos y trabajadores sociales para estar atentos a los trabajos.
“Tenemos calculado que vamos a necesitar de cuatro a cinco semanas que nos aseguren que los jugadores van a estar en muy buenas condiciones. Hay situaciones que son inherentes al juego y por eso la necesidad de empezar antes”, recalcó el médico Portela.
Un profesional de la salud, cuya experiencia en selecciones Colombia y el apoyo a procesos deportivos exitosos con Reinaldo Rueda o Francisco Maturana, otorgan suficiente relevancia a sus reflexiones. En su criterio, “la disminución del ritmo de competencia expone a la aparición de lesiones, sobre todo musculares, porque se ve afectada la fuerza y la potencia de los jugadores”.
Su trayectoria adicional en institutos deportivos departamentales en Quindío y el Valle del Cauca le dan autoridad para precisar que si bien no es lo mismo trabajar en plataformas digitales que en un campo de juego, la clave es comenzar a prepararse cuando se anuncie la fecha del reintegro.
“Sin conocer las intimidades de los equipos, hay que evaluar si en Alemania fue prematuro iniciar la liga con tan poco tiempo de entrenamiento, y si eso incidió en el número de lesionados”, agrega el médico Gustavo Portela, quien confió en que la planificación médica y física es crucial para reducir los riesgos de lesiones cuando vuelva el fútbol.
Otra opinión autorizada la aporta el fisioterapeuta Sebastián Botero Echeverry, quién lleva más de una década enfocado en el manejo del dolor con el uso de equipos de alta tecnología. Su primera sugerencia es que cada deportista debe adelantar un trabajo específico de precalentamiento y calentamiento por grupos musculares, con ejercicios diferenciados de táctica y técnica.
También es claro en advertir que el trabajo en casa nunca va a ser igual al que se realiza en el campo de juego, pero lo ideal es retomar la actividad física como un proceso de acondicionamiento gradual y escalonado con buen control a nivel médico y de entrenamiento.
“Las lesiones más probables son las de tejidos blandos tales como tendones y ligamentos. Las más comunes son los desgarros, los esguinces y las luxaciones. También se pueden presentar inflamaciones por sobrecargas o lesiones de rodillas”, comenta Botero Echeverry.
Un reconocido profesional, quien desde su empresa Fisiolaser Colombia con cinco consultorios en Medellín y la expectativa de hacerlo en breve en Bogotá, Miami (Estados Unidos) y Madrid (España), sabe bien que “escuchar al cuerpo es un aspecto importante, lo mismo que una alimentación saludable y balanceada, acompañada de buenos ejercicios de respiración y estiramiento.
Botero Echeverry, quien ha trabajado con futbolistas como Juan Guillermo Cuadrado o atletas de alto rendimiento como Carolina Tavares, Mauricio Ortega o Jacobo de León, también considera que se requiere entre cuatro y seis semanas de entrenamiento con procesos de medición, supervisión y trabajos de campo para retomar el nivel competitivo.
“Una vez se retome la actividad es importante el control a nivel médico con trabajo individualizado, protocolos de descanso y monitoreo de la potencia muscular y la fatiga. La idea es actuar de manera preventiva con cada futbolista en elasticidad, velocidad de reacción, aceleración y algunos aspectos cognitivos”.
Por lo que se deduce de la reunión sostenida esta semana por varios presidentes de clubes con los senadores de la Comisión Séptima, Álvaro Uribe y Honorio Henríquez, el cálculo inicial para iniciar la primera fase de entrenamientos con miras al retorno de la Liga Betplay, podría estar entre junio y julio.
Es decir, las recomendaciones del médico Gustavo Portela y el fisioterapeuta Sebastián Botero deberían ser asumidas en breve. Aunque cada club profesional tiene sus propios protocolos médicos y de entrenamiento, para unos y otros, así como para otros deportistas, hay directrices generales que deben tenerse en cuenta.
“Llevábamos unas diez semanas de trabajo en las que los jugadores estaban por alcanzar su pico competitivo. Ahora es necesario un trabajo preventivo que incluye asistencia médica para evitar lesiones musculo-tendinosas”, exalta el médico Gustavo Portela.
El facultativo también tiene una sugerencia a todos los deportistas: “El cuidado de la alimentación, disminuyendo el consumo de carbohidratos y azucares, para centrarse más en verduras, frutas y proteínas, además de consumir mucha agua para no descompensar la parte metabólica en estos tiempos en los que se ha rebajado la actividad laboral y deportiva”.
A su vez el fisioterapeuta Sebastián Botero, de manera general recomienda para las personas que no tienen buen estado físico o que han dejado de ejercitarse por tiempo prolongado, que no realicen trabajos de una hora o dos de alta intensidad.
“Es importante que las personas sepan que el cuerpo se debe ir adaptando de manera paulatina a la actividad deportiva. Si una persona normalmente no sufre de dolores musculares, y empieza a sentir calambres o corrientazos, lo mejor es asesorarse con un profesional para recibir instrucciones y así evitar las lesiones graves”, concluye Botero basado en su larga experiencia profesional.
Al margen de algunos protocolos como el chequeo de la frecuencia cardíaca, la vigilancia del peso o la asesoría nutricional, familiar y psicológica, en todos los clubes profesionales de fútbol subsiste una preocupación mayor: disminuir las posibilidades de contagio del coronavirus.
Con base en las experiencias de Alemania, España o Italia, el médico Gustavo Portela resalta que, antes que nada, es importante la responsabilidad individual. Por eso, cuando se dé la hora cero para el reinicio de las actividades, en su equipo ya están previstos mucho más que los desinfectantes, tapabocas, guantes o carpas para trabajar con grupos reducidos.
“Vamos a hacer pruebas con proteínas C molecular siete días antes de los entrenamientos, como también test rápidos para hacer seguimientos y evaluar, en un periodo previo de 28 días, como están los jugadores”, concluye el profesional médico del Deportivo Cali, uno de los equipos que confía en que, cuando se superen los dilemas planteados por las autoridades de salud, se pueda dar inicio a los protocolos de control médico y ejercicios precompetitivos.
Lo sucedido el fin de semana anterior en Alemania con doce jugadores lesionados, diez de ellos de la primera división, enseña que es necesario prevenir para no repetir esta experiencia.
Lo demás sigue por cuenta de los directivos y las autoridades. Cuatro viceministros y un representante de la cartera de trabajo participaron en la reunión virtual que varios presidentes de clubes y los rectores de la federación de fútbol y la Dimayor hicieron con los senadores Uribe Vélez y Honorio Henríquez.
Se habló de créditos económicos, protocolos sanitarios, consecución de recursos y contratos de trabajo, pero lo único claro es que todavía no hay luz sobre el regreso de la liga. Unos dicen que julio, otros que agosto o septiembre, para unos y otros la otra premisa es estar preparados para que cuando llegue vuelva a rodar el balón, no empiece la lista de lesionados.
